Envejecer es normal, hay que aceptarlo con dignidad.

La senescencia concierne a todos los seres humanos, los animales y las plantas. Aparece después de la edad madura y se caracteriza por el envejecimiento progresivo y lento de los tejidos y de los órganos. La senescencia es fisiológica y programada. Afecta a todos los órganos, a todas las células del cuerpo humano que empiezan a envejecer. Este envejecimiento causa una desaceleración de las actividades del organismo y de las funciones vitales, creando un debilitamiento general del cuerpo y finalmente la muerte. Este proceso es inevitable y no se puede revertir.
Todos nosotros tenemos una idea aproximada de lo que es hacerse viejo o mayor, por lo que observamos en el entorno o en nosotros mismos. Sin embargo, definir qué es el envejecimiento no es fácil.
En general, la mayoría de especialistas en el tema definen el envejecimiento como las transformaciones físicas, metabólicas, mentales y funcionales que se producen a lo largo del tiempo, que comportan una disminución de la capacidad de adaptación a los cambios del entorno, y una mayor dificultad para mantener estable el medio interno. Esto lleva a un aumento de la vulnerabilidad y de la fragilidad.
Estos son cambios inevitables, que se consideran “envejecimiento fisiológico”, a los que hemos de añadir los cambios que ocasionan los diferentes estilos de vida, el medio ambiente y las enfermedades padecidas, es decir el “envejecimiento patológico”. Este último es diferente para cada individuo y para cada órgano y sistema; nos da la “edad biológica o funcional”, en contraposición con la “edad cronológica”. Todos conocemos a personas que representan una edad diferente de la suya, a veces más viejos, a veces más jóvenes.
Envejecer no es una enfermedad, sino un cambio inseparable de la vida. En general se considera que se inicia al finalizar la fase de crecimiento y madurez de los individuos; al principio sus efectos son imperceptibles y van siendo más visibles con el paso del tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario