Si hay algo que ennoblezca a la juventud, es el miramiento y el respeto a los ancianos.
José Marti
Hay que Envejecer Dignamente.
Uno de los terribles y grandes problemas de muchos hombres y mujeres, es el miedo a hacerse viejos; las arrugas, las canas, la lentitud y pérdida de memoria, sobre saltan de manera alarmante su vida; tratan de vestir joven, se pintan constantemente el pelo, tratan de hacer actividades que hace 10 años los hacía sentirse seguros; la comida y las enfermedades las tratan de no asociarlas con la edad, pero es más angustioso cuando empiezas a depender para algunas cosas de otros, claro que es difícil para todos, sin embargo también hay que concientizar que ese es el mismo procesos por lo que han pasado todos aquellos seres queridos que ya no están con nosotros.
El gran reto será: ¿Cómo afrontar esta realidad?, vale la pena recordar que esta vida es temporal nuestra, por tanto, en esta etapa de nuestra vida hay que ser dignos y gozar la vejes, intensificar la consciencia para disfrutar cada minuto bueno y malo.
Es un regalo poder llegar a viejo, esta es la etapa de la vida que ha sido reservada a pocos afortunados que lograron vencer hasta ese momento la muerte y las enfermedades. Desafortunados también, porque han perdido a familiares y amigos que quedaron en estaciones anteriores. Si se llega a la edad que otros no pudieron, pues cada día es una ocasión más que especial para vivir mejor y saber adaptarnos.
Lo mejor en esta fase que comienza es que no hay arrugas en el corazón ni en los sentimientos. Lo ideal es envejecer con dignidad, llevar las canas dignidad.
Una actitud positiva permite una vida más larga. Se piensa que el pensamiento positivo sobre el envejecimiento aumenta la voluntad para vivir, y hace a la persona más resistente a las enfermedades. Además, el estrés mental respecto al envejecimiento es menor para quienes tienen una actitud positiva.
Hay que trazar un plan muy positivo, alegre y optimista para que los años no derrumben tu espiritu, y conocer más nietos, quizás bisnietos, amigos; y sobreponerme a la pérdida de los que tienen que abandonarme en esta trayectoria.

No hay comentarios:
Publicar un comentario